Prioridades en gastos
Carta publicada en el Diario de Concepción, Martes 15 de Diciembre de 2015
http://www.diarioconcepcion.cl/?q=node/3410
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Chile
es el tercer país que más gasta en defensa en Sudamérica, superado por Brasil y
Colombia, el primero una de las grandes potencias mundiales y el segundo un
país con serios conflictos con la guerrilla y el narcotráfico. En los últimos
15 años Chile ha destinado 20 mil millones de dólares a la compra de armamento
y el gasto total en defensa corresponde a aproximadamente 5.300 millones de
dólares al año, un 1.9% de producto interno bruto (PIB). En Ciencia y
Tecnología, Chile invierte un 0.35% del PIB hace más de una década, lo que
extrapolado a los últimos 15 años serían unos 13.500 millones de dólares
invertidos durante ese periodo (siendo generosos), situándose en los últimos
lugares de la OCDE y por debajo de Argentina (0.8% PIB) o Brasil (1.1% PIB). Es
decir, en un año el Estado de Chile gasta alrededor de 5 veces más en defensa
que en Ciencia y Tecnología. Ahora, sumado al destape del millonario desfalco
al interior del ejército (“milicogate”), vale preguntarse cuáles son las prioridades
que como país debemos establecer para lograr el tan ansiado desarrollo. Pero no
un desarrollo cualquiera, sino uno que vaya más allá de números y porcentajes,
un desarrollo integral que asegure la dignidad y el bienestar para todo el o la
que habite el territorio. Para esto, un objetivo fundamental sería arrogarnos
el derecho a tener un desarrollo científico público y de calidad, lo cual
permitirá avanzar de manera concreta hacia los anhelos de más y mejor
educación, salud, vivienda, trabajo y energía. El asegurar el avance progresivo
de la ciencia nacional debe entenderse como una prioridad fundamental para
cualquier gobierno, salvaguardando siempre que los problemas a resolver por los
científicos tengan relación con las principales necesidades de nuestra
población. Tanto este derecho a la ciencia pública, como otros derechos
básicos, debieran ser materia del proceso constituyente que nos asegure la base
primordial para poder comenzar a hablar de libertades plenas.
Marcelo González
Ortiz
Presidente Asociación
de Académicos y académicas
Enrique Molina
Garmendia – Universidad de Concepción
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